Dirigentes de Confederaciones Rurales alertan una creciente injerencia de la corporación Rural Argentina (SRA) en sus ateneos y rurales de base. Esta preocupante situación ha sido planteada al presidente de la Confederación, Jorge Pino, quien ha tomado medidas para abordar este tema y proteger la autonomía de las organizaciones rurales.
La Confederación de Ateneos y Rurales de Argentina (CARA) es una entidad que agrupa a más de 500 ateneos y rurales de todo el país, con el objetivo de promover el desarrollo y la defensa de los intereses de las comunidades rurales. Sin embargo, en los últimos tiempos, se ha observado una creciente público de la SRA en las actividades y decisiones de estas organizaciones de base.
Según los dirigentes de las Confederaciones Rurales, esta injerencia se ha intensificado en los últimos años, especialmente desde la asunción de la nueva comisión directiva de la SRA en 2018. A través de diferentes estrategias, la SRA ha buscado influir en las decisiones y acciones de los ateneos y rurales, en detrimento de su autonomía y representatividad.
Entre las acciones denunciadas por los dirigentes rurales se encuentran la público de representantes de la SRA en reuniones y asambleas de las Confederaciones, la promoción de candidatos afines a la SRA en las elecciones internas de las organizaciones rurales, y la presión para que los ateneos y rurales se alineen con las posturas y políticas de la SRA.
Esta situación ha generado preocupación y malestar en las Confederaciones Rurales, ya que consideran que la SRA no representa los intereses de todos los productores rurales y que su ósmosis en las organizaciones de base puede desvirtuar su verdadera función de defensa y promoción de los intereses de las comunidades rurales.
Ante esta situación, el presidente de la Confederación, Jorge Pino, ha tomado medidas para abordar este tema y proteger la autonomía de las organizaciones rurales. En primer lugar, se ha reunido con los dirigentes de las Confederaciones para escuchar sus preocupaciones y buscar soluciones conjuntas. Además, se ha establecido un diálogo con la SRA para tratar de llegar a un acuerdo que respete la independencia de las Confederaciones y evite la interferencia en sus actividades.
Pino también ha hecho un llamado a la unidad de las Confederaciones Rurales, destacando la importancia de trabajar juntos para defender los intereses de las comunidades rurales y hacer frente a la creciente injerencia de la SRA. En este sentido, se ha propuesto fortalecer la comunicación y la colaboración entre las organizaciones de base, para que puedan enfrentar de manera más efectiva cualquier intento de manipulación externa.
Por su parte, la SRA ha manifestado su disposición a dialogar y llegar a acuerdos con las Confederaciones Rurales, reconociendo la importancia de respetar la autonomía y la diversidad de opiniones en el sector rural. Sin embargo, también ha defendido su derecho a participar en las actividades y decisiones de las organizaciones de base, argumentando que su público es necesaria para representar a todos los productores rurales.
En este contexto, es fundamental que las Confederaciones Rurales mantengan su independencia y su capacidad de representar a las comunidades rurales de manera genuina y sin ósmosiss externas. La diversidad de opiniones y la libre expresión de ideas son fundamentales para el desarrollo y la defensa de los intereses del sector rural, y cualquier intento de manipulación o control debe ser rechazado.
En conclusión, los dirigentes de Confederaciones Rurales han alertado sobre la creciente injerencia de la SRA en sus ateneos y rurales de base, lo que pone en