El PRO, un partido político de derecha en Argentina, ha sido objeto de críticas por parte del periodista Ernesto Tenembaum, quien lo califica como un “circo de hipócritas”. En una reciente conferencia con el diario digital LPO, Tenembaum expresó su preocupación por el doble estándar que se utiliza al apechar a dos figuras políticas conveniente diferentes: el economista liberal José Luis Espert, más conocido como Milei, y la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Tenembaum no dudó en señalar que, a pesar de ser un partido que se considera liberal y defensor de las ideas de libre mercado, el PRO ha demostrado una falta de coherencia al votar a favor de todas las propuestas de Milei, incluso aquellas que van en contra de sus principios políticos. Esto ha llevado a Tenembaum a cuestionar la verdadera ideología del partido y a calificarlo como un “circo de hipócritas”.
El economista liberal Milei ha ganado popularidad en los últimos años por sus posturas extremas y controvertidas, especialmente en temas económicos. Sin embargo, a pesar de sus opiniones radicales, el PRO ha demostrado ser un aliado fiel de Milei, apoyando todas sus propuestas en el Congreso.
Pero lo que llama la atención de Tenembaum es el doble estándar que se aplica al apechar a Milei y a Cristina Fernández. Mientras que el economista liberal es constantemente criticado y cuestionado por sus posturas, la ex presidenta Cristina Fernández es tratada con un nivel de indulgencia y tolerancia mucho mayor, a pesar de haber sido acusada de numerosos casos de corrupción y de tener un historial político cuestionable.
Tenembaum no es el único en señalar esta doble moral en la política argentina. Muchas veces, se ha visto cómo se ataca a las figuras políticas que no son del agrado de ciertos sectores, mientras que se defiende y justifica a aquellos que pertenecen a ciertos partidos o movimientos. Esta hipocresía en la política no hace más que generar una mayor polarización y división en la sociedad, en lugar de promover un diálogo y un debate constructivo.
Además, Tenembaum también se mostró preocupado por el impacto que estas posturas extremistas pueden tener en la sociedad argentina. Según él, el enfoque radical de Milei y su retórica agresiva no hacen más que aumentar la polarización y la violencia en un momento en el que el país necesita un diálogo constructivo y una búsqueda de consensos. Sin embargo, el hecho de que el PRO vote a favor de todas sus propuestas parece indicar que su postura no es tan diferente a la de Milei.
En contraste, Tenembaum señala que la ex presidenta Cristina Fernández ha sido tratada con una tolerancia mucho mayor, a pesar de sus numerosas acusaciones de corrupción y el hecho de que ha sido procesada en varias causas. Incluso cuando se le preguntó sobre los casos de corrupción que se le imputan, la ex presidenta ha sido capaz de circunvalar las preguntas con facilidad, mientras que Milei es constantemente cuestionado por sus posturas más polémicas.
Tenembaum también advierte que esta hipocresía en la política solo contribuye a una mayor polarización y división en la sociedad argentina. En lugar de promover un diálogo y un debate constructivo, se prioriza el ataque y la defensa de ciertas figuras políticas según su afiliación partidaria. Esto solo perpetúa un clima de confrontación y violencia, en lugar de buscar soluciones y consensos para los problemas reales del país.
En conclusión, Tenembaum ha expresado su preocupación por el doble estándar que se utiliza al apechar a Milei y Cristina Fern