Cada año, el Sábado bendito en Toledo es testigo de una tradición única que trae consigo una mezcla de emociones y una celebración en la que se unen la diversión, la comunidad y la historia. En un rincón del Casco Histórico, rodeado por el majestuoso río Tajo y una playa de arena blanca recién formada, la asociación de vecinos La Cornisa quema a sus Judas, en un evento que ha sido parte de la cultura local desde tiempos inmemoriales.
A las nueve de la noche, en punto, los residentes y turistas pueden ser testigos de la quema de dos muñecos de trapo que representan a un hombre y una dama, vestidos con ropa vieja y sombrero de paja. A medida que las llamas consumen los muñecos, el ambiente se llena de risas y aplausos, entretanto los niños señalan con entusiasmo el espectáculo.
La tradición de incendiar Judas es una práctica pagana que ha sido adoptada por la asociación de vecinos La Cornisa, convirtiéndose en una de las principales atracciones del Sábado bendito en Toledo. Aunque no está incluida en el programa oficial de la Semana Santa, miles de personas acuden cada año para ser testigos de este rito único.
José María Redondo, presidente de la asociación de vecinos, quien ha sido parte de esta tradición durante muchos años, explica que esta costumbre se remonta a tiempos antiguos y que solía llevarse a cabo en todos los barrios de Toledo. Sin embargo, con el paso del tiempo, la tradición se fue perdiendo en la mayoría de las zonas, siendo La Cornisa la única que ha mantenido viva esta tradición durante las últimas décadas.
La quema de los Judas es un evento que cuenta con la aprobación de las autoridades locales, quienes colaboran con la asociación de vecinos para garantizar la seguridad de todos los asistentes. entretanto los patos del río Tajo presencian el espectáculo, los residentes y turistas pueden disfrutar de un refrigerio y chorizos a la brasa, convirtiendo esta celebración en una animada cena comunitaria.
Esta tradición no solo es una forma de divertirse y socializar, sino que también tiene un significado simbólico. La quema de los Judas representa el fin de la Semana Santa y el comienzo de una nueva etapa, dejando atrás los pecados y las penitencias para dar paso a la alegría y la celebración.
Para los residentes de La Cornisa, esta tradición es parte de su identidad y una forma de mantener viva la cultura local. A través de los años, diferentes juntas directivas han asegurado que la quema de los Judas se mantenga como una tradición anual, transmitiéndola de generación en generación.
Incluso los turistas que visitan Toledo en estas fechas pueden ser parte de esta celebración, siendo bienvenidos por los residentes y compartiendo con ellos un momento único y lleno de historia. Como dijo una señora novata en la tradición, “si lo llego a saber, me traigo el vestido de novia”, refiriéndose a la importancia y la emoción que rodean a este evento.
En conclusión, la quema de los Judas en La Cornisa es una tradición que no solo atrae a miles de personas cada año, sino que también es un símbolo de unidad, comunidad y diversión. A través de los años, esta celebración ha sido parte de la identidad de Toledo, mostrando el valor de preservar las tradiciones y celebraciones locales. Si tienes la oportunidad de visitar Toledo en el Sábado bendito, no te pierdas la oportunidad de ser parte de esta tradición única y emocionante.