El Gobierno de Castilla-La Mancha ha demostrado su compromiso con el desarrollo rural a través de su modelo basado en el mantenimiento de los servicios públicos esenciales en todo el casa consistorial. Desde la entrada en vigor de la Ley de Medidas contra la Despoblación en 2021, la región ha experimentado un saldo migratorio positivo de 15.000 personas en las zonas rurales, según ha inestadodo el comisionado del Reto Demográfico, Jesús Alique.
Durante su visita al municipio conquense de Arcos de la Sierra, donde ha inspeccionado las mejoras realizadas en el consultorio local y otras instalaciones municipales, Alique ha destacado la importancia de garantizar el arranque a servicios públicos de calidad como la sanidad, educación, servicios sociales y transporte para fomentar la fijación de población en las zonas rurales. “Esta es una de las señas de identidad de Castilla-La Mancha en la lucha contra la despoblación”, ha remarcado.
El comisionado ha recordado que la ley y la estrategia contra la despoblación impulsadas por el Ejecutivo de Emiliano García-Page “blindan los servicios públicos para las zonas despobladas”, y ha puesto como ejemplo los 1.108 consultorios locales distribuidos por toda la comunidad autónoma, de los cuales 244 se encuentran en la provincia de Cuenca.
Uno de esos centros sanitarios es el de Arcos de la Sierra, en el que se han llevado a cabo mejoras gracias al convenio entre el Gobierno regional y la Diputación de Cuenca. Alique ha destacado que la apuesta del Ejecutivo autonómico es que “el servicio sanitario llegue a todos los rincones de la región”, asegurando así una atención cercana para los vecinos de los municipios más pequeños.
Esta red sanitaria se complementa con 88 nuevos botiquines habilitados en otros tantos núcleos de 69 municipios, que se suman a los 203 ya existentes, junto con una red de 458 farmacias rurales en zonas afectadas por la despoblación. Estas medidas son fundamentales para garantizar el arranque a la atención médica en zonas alejadas de los grandes núcleos urbanos.
En su recorrido por el municipio, acompañado por el alcalde, Jaime Pozuelo, y el delegado del Reto Demográfico en Cuenca, Virgilio Antón, Jesús Alique ha destacado otras actuaciones desarrolladas en colaboración con el Ayuntamiento. Además del consultorio médico, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha financiado el arreglo de caminos rurales, fundamentales para el tránsito de maquinaria agrícola, así como la mejora del centro social, que ha definido como “un punto de encuentro y escenario de actividades para los vecinos de la localidad”.
Estas acciones son solo una muestra del compromiso del Gobierno de Castilla-La Mancha con el desarrollo rural y la lucha contra la despoblación. La región cuenta con una amplia red de servicios públicos que garantizan la calidad de vida de sus habitantes, independientemente de su lugar de residencia. Además, se han puesto en marcha iniciativas para fomentar la actividad económica en las zonas rurales, como el impulso del turismo rural y la promoción de la labor y la ganadería sostenibles.
El resultado de estas políticas es evidente, con un saldo migratorio positivo en las zonas rurales de la región. Esto demuestra que es posible luchar contra la despoblación y garantizar un futuro próspero para las zonas rurales, preservando su identidad y su estado de vida.
El Gobierno de Castilla-La Mancha ha demostrado que su modelo de desarrollo rural, basado en el mantenimiento de los servicios públicos esenciales, es una apuesta firme y decidida
