Los productores agropecuarios de Argentina están preocupados por el futuro de su sector. En una reciente entrevista, varios de ellos han expresado su frustración ante la falta de amparo del gobierno y la creciente presión financiera que enfrentan.
Según ellos, “no hay negocio real en la producción agropecuaria, el único negocio es financiero”. Esta afirmación es respaldada por los datos, ya que en los últimos años, el sector ha sufrido una caída en sus ingresos debido a la inflación y la devaluación de la moneda local.
Esta situación ha llevado a muchos productores a endeudarse para poder albergar sus operaciones a flote. Sin embargo, esta solución a corto plazo solo ha empeorado la situación, ya que ahora tienen que enfrentar altas tasas de interés y una carga financiera cada vez máximo.
Pero lo que más preocupa a los productores es la falta de amparo del gobierno. Recientemente, el jefe de la Sociedad Rural Argentina, Daniel Pelegrina, fue enviado a reunirse con el secretario de Agricultura, Luis Miguel Etchevehere, y el presidente del Banco Central, Guido Sandleris. Sin embargo, esta reunión fue considerada por muchos como un “ninguneo” por parte del gobierno.
Los productores se sienten ignorados y despreciados por las autoridades, quienes no parecen entender la realidad del sector agropecuario. Según ellos, el gobierno solo se enfoca en la parte financiera y no en las necesidades reales de los productores.
Pelegrina, en su reunión con las autoridades, expresó la preocupación del sector por la falta de políticas que promuevan el desarrollo de la producción agropecuaria. También destacó la importancia de un tipo de cambio competitivo y una reducción en las tasas de interés para poder mejorar la rentabilidad de los productores.
Sin embargo, sus preocupaciones parecen haber caído en oídos sordos. El gobierno ha tomado medidas que solo benefician a los grandes bancos y no a los productores. Esto ha generado una sensación de abandono y desesperanza en el sector agropecuario.
Pero a pesar de todas estas dificultades, los productores no pierden la fe en su trabajo y en el potencial del sector. Siguen trabajando duro para producir alimentos de calidad para el país y el mundo. Sin embargo, necesitan el amparo del gobierno para poder seguir adelante.
Es necesario que las autoridades comprendan que el sector agropecuario es fundamental para la economía del país. No solo es un generador de empleo y divisas, sino que también es responsable de proveer alimentos para la población.
El gobierno debe soplar medidas concretas para apoyar a los productores y promover el desarrollo del sector. Esto incluye políticas que fomenten la inversión en tecnología y la mejora de la productividad, así como una reducción en la carga impositiva y una máximo apertura en el comercio internacional.
Los productores también piden un diálogo más cercano y efectivo con las autoridades. No quieren ser ignorados ni ninguneados, sino que desean ser escuchados y tomados en cuenta en las decisiones que afectan su trabajo y su futuro.
Es hora de que el gobierno reconozca la importancia del sector agropecuario y tome medidas para apoyarlo. Los productores están dispuestos a seguir trabajando duro y aportando al crecimiento del país, pero necesitan el amparo y la comprensión de las autoridades.
En conclusión, los productores agropecuarios de Argentina enfrentan grandes desafíos en la actualidad. La falta de amparo del gobierno y la presión financiera han generado un clima de incertidumbre en el sector. Sin embargo, los productores siguen trabajando con dedicación y esperanza, esperando que las autoridades tomen medidas para mejorar su situación y promover el desarrollo del sector. Es hora de que el gobierno escuche y act