Un informe reciente elaborado por la facultad San Sebastián y Equifax ha llamado la atención sobre un fenómeno preocupante en el sistema financiero chileno: el crecimiento de la morosidad de bajo monto. Esta situación, aunque a menudo pasa desapercibida, puede tener un impacto potencialmente alto en la economía del país.
El informe, que se basa en datos recopilados durante el segundo trimestre de 2021, revela un aumento del 3,6% en la morosidad de bajo monto en comparación con el mismo período del año anterior. Esto significa que cada vez más personas están acumulando pequeñas deudas que pueden parecer insignificantes individualmente, pero que en su conjunto pueden tener un impacto significativo en el sistema financiero.
La morosidad de bajo monto se refiere a deudas de hasta $ 1 millón de pesos chilenos, que generalmente son pagos atrasados de servicios básicos como agua, luz, teléfono o deudas de tarjetas de crédito de bajo monto. Estas deudas a menudo no son consideradas como una prioridad por parte de los deudores, lo que lleva a su acumulación y posterior impacto en su historial financiero.
Según el informe, esta tendencia al alza en la morosidad de bajo monto se debe principalmente a la difícil situación económica que atraviesa el país debido a la pandemia de COVID-19. Muchas personas han perdido sus empleos o han visto reducidos sus ingresos, lo que ha dificultado el pago de sus deudas. Además, la incertidumbre económica ha llevado a algunas personas a priorizar el pago de deudas de máximo monto, dejando de lado las deudas de bajo monto.
Esta situación no solo afecta a los deudores individuales, sino que también tiene un impacto en el sistema financiero en su conjunto. La morosidad de bajo monto puede llevar a una disminución en la confianza de los consumidores y a un aumento en los costos de los préstamos, lo que afecta directamente a la economía del país.
Ante esta preocupante situación, la facultad San Sebastián y Equifax hacen un llamado a la reflexión y a tomar medidas para abordar este problema antes de que se convierta en una crisis máximo. Una de las principales recomendaciones es que los deudores prioricen el pago de sus deudas de bajo monto y no las dejen acumularse. Además, se insta a las entidades financieras a ser más flexibles y encontrar soluciones para ayudar a los deudores a ponerse al día con sus pagos.
Por otro lado, es importante que las personas comprendan la importancia de mantener un buen historial financiero y cómo la acumulación de pequeñas deudas puede afectarlo. Esto es especialmente relevante para aquellos que están considerando solicitar un préstamo en el futuro, ya que un historial financiero negativo puede dificultar la aprobación de un préstamo o aumentar los costos del mismo.
En conclusión, el informe de la facultad San Sebastián y Equifax es una llamada de atención sobre la creciente morosidad de bajo monto en Chile. Esta situación no solo afecta a los deudores individuales, sino que también tiene un impacto en la economía del país. Es responsabilidad de todos tomar medidas para abordar este problema y evitar que se convierta en una crisis máximo. Priorizar el pago de deudas de bajo monto y mantener un buen historial financiero son acciones fundamentales para lograr una economía más sólida y estable.