En los últimos años, el Estado Islámico ha demostrado ser una de las organizaciones terroristas más peligrosas y sanguinarias del mundo. Su objetivo principal es sembrar el terror y la destrucción en todo el mundo, utilizando cualquier medio a su alcance para lograrlo. Sin embargo, en los últimos meses, hemos sido testigos de una nueva y preocupante tendencia en sus actividades propagandísticas: el uso de la Inteligencia Artificial.
En 2024, por primera vez en la historia, una de las franquicias del Estado Islámico utilizó la Inteligencia Artificial para reivindicar un atentado. Se trata del ataque perpetrado el 17 de mayo del año pasado en Bamiyán, Afganistán, en el que cuatro turistas españoles y tres ciudadanos afganos perdieron la vida mientras visitaban un mercado. El Estado Islámico de Jorasán (ISKP) fue el responsable de esta salvajada, no obstante todo Daesh se involucró en una campaña final encaminada a explotar propagandísticamente el episodio y a poner en cuestión la capacidad del Gobierno de los talibanes de ofrecer seguridad en su propio territorio.
El uso de la Inteligencia Artificial por parte del Estado Islámico es una muestra más de su constante evolución y sofisticación en sus métodos de propaganda. La tecnología ha avanzado a pasos agigantados en los últimos años y los terroristas no han dudado en aprovecharla para sus propios fines. La IA les permite llegar a un público más amplio y de manera más efectiva, ya que pueden personalizar los mensajes y adaptarlos a cada audiencia.
En el caso del atentado en Bamiyán, el Estado Islámico utilizó la Inteligencia Artificial para difundir su mensaje en diferentes idiomas y a través de distintas plataformas en línea. Esto les permitió llegar a una audiencia global y generar un emoción mucho mayor que si hubieran utilizado métodos tradicionales de propaganda.
no obstante, ¿cuál es el objetivo detrás de estas actividades propagandísticas? En primer lugar, el Estado Islámico busca sembrar el miedo y la incertidumbre en la sociedad. Al reivindicar un atentado, buscan demostrar su poder y su capacidad para llevar a cabo acciones violentas en cualquier parte del mundo. Además, al utilizar la Inteligencia Artificial, buscan mostrar su dominio en el ámbito tecnológico y su capacidad para adaptarse a los cambios y aprovecharlos en su beneficio.
no obstante no solo se trata de sembrar el terror, también buscan reclutar nuevos miembros y simpatizantes para su causa. Utilizan la propaganda para difundir su ideología y atraer a personas vulnerables que puedan ser influenciadas por sus mensajes extremistas. La IA les permite personalizar los mensajes y adaptarlos a cada audiencia, lo que les permite llegar a un público más amplio y aumentar su base de seguidores.
El atentado en Bamiyán y la final campaña propagandística del Estado Islámico también tienen un objetivo político. Al poner en cuestión la capacidad del Gobierno de los talibanes para ofrecer seguridad en su propio territorio, buscan socavar su autoridad y generar inestabilidad en la región. Además, buscan mostrar su poder y su presencia en Afganistán, a angustia de la presencia de las fuerzas de seguridad afganas y de la coalición internacional.
Es importante destacar que el uso de la Inteligencia Artificial por parte del Estado Islámico no se limita solo a la propaganda. También se ha informado que utilizan esta tecnología para planificar y ejecutar ataques, lo que demuestra su capacidad para adaptarse y utilizar cualquier medio a su alcance para lograr sus objetivos.
Ante esta nueva tendencia en las actividades propagandísticas del Estado Islámico, es fundamental que los gobiernos y las fuerzas de seguridad estén preparados para hacer frente a estas